Avaliação do Programa e.escolinha no 1.º Ciclo do Ensino Básico
- Gonçalves Antunes, Nuno
- Ana García-Valcárcel Muñoz-Repiso Director/a
- Francisco Javier Tejedor Tejedor Director/a
Universidad de defensa: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 13 de julio de 2012
- Ángel García del Dujo Presidente/a
- María José Rodríguez Conde Secretaria
- Teresa Pessoa Vocal
- Paulo Martins Vocal
- Adriana Gewerc Barujel Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
[ES] El Plan Tecnológico de Educación, donde se incluye el programa, e.escolinha, aunque sometido a un juicio social y político, es el programa educativo más audaz en lo que respeta la modernización tecnológica en Portugal. La ejecución del plan se centra en tres dimensiones diferentes si bien complementarias: I) medida estructural de base tecnológica que se aplicará en todas las escuelas, II) diseño de una red de desarrollo y distribución en línea de contenidos educativos y servicios, III) aplicación de programas didácticos para consolidar los conocimientos en Tecnologías de la Información e la Comunicación de alumnos y profesores. La grandeza del programa se comprueba en la intención política de poner a Portugal en los cinco primeros países europeos con la mayor y mejor infraestructura tecnológica de su red escolar. Para lograr este osado objetivo, el plan abarca tres objetivos operativos anunciados para el año 2010: (I) la velocidad de conexión a Internet (48 Mbps), (II) dos alumnos por ordenador con conexión a Internet, (III) 90% de los maestros con certificación en las TIC. Se presenta como objetivo primordial la necesidad de "lograr un uso efectivo de ordenadores portátiles en el contexto de aprendizaje, en particular en la aula". Es en este panorama de aceptación por parte de la sociedad civil de su materialización, paralelamente con la popularidad que ganó el ordenador Magalhães entre los alunos que es importante reflejar y poner a prueba las perspectivas para el cambio a que las escuelas de hoy son obligadas. El estudio se centra, aunque en una amplia gama de agentes, sobre todo en la reflexión que este cambio va a acarrear en los docentes como agentes operantes de las políticas y de las prácticas educativas, pero también percibir el impacto del programa en las prácticas pedagógicas y en el aprendizaje de los alumnos.