García Fraguas y la implantación de la educación en España

Laburpena

[ES] José Esteban García Fraguas, licenciado en medicina, ocupó una de las primeras diez cátedras de Gimnástica en España. Como profesor de esta materia se formó en la ECG y comenzó su andadura profesional oficial en el curso 1893-94 en el Instituto de segunda enseñanza de Salamanca, continuando su ejercicio en otras ciudades como Valencia, Zaragoza y Barcelona. Su formación médica le permitió optar a una de las primeras plazas de inspector de Sanidad en el año 1905 y obtuvo el segundo lugar. Por lo que a partir de este momento compaginaría su trabajo de profesor de Gimnástica con el de Inspector provincial de Sanidad. A este personaje se dedica esta investigación, teniendo en cuenta las características de su personalidad y los planteamientos que ofreció sobre la Educación Física (E.F.), puede ser considerado como una de las piedras angulares sobre las que se ha apoyado la historia de la E. F. en España hasta conseguir el rango del que goza en la actualidad. La perspectiva histórica de la E. F. indica que ha existido una notable evolución en los métodos y contenidos de aprendizaje, así como también en cuanto a su reconocimiento, hasta llegar a consolidarse y ofrecer la consideración de la que hoy disfruta, tanto la asignatura en sí, como los profesores responsables de su docencia. El fruto obtenido de esa superación se debe al trabajo y a las horas de esfuerzo que para su cultivo han dedicado tantas y tantas personas, reconocidas muchas, otras aún en el anonimato. Esta tesis doctoral se ha centrado en la contribución del profesor García Fraguas a la implantación y al desarrollo de la E.F. Sin duda alguna, sus diferentes actuaciones marcaron el devenir de la incipiente Gimnástica obligatoria en los institutos de segunda enseñanza por los que pasó. Fraguas apoyó sin vacilación la necesidad del aprendizaje y la cualificación de los profesores de Educación Física, que debían ser auténticos profesionales ejerciendo su cometido de acuerdo con los métodos y formas apropiados a la edad y características del alumnado, contribuyendo así a la legitimación del personal y a aceptar su actuación basada en criterios pedagógicos. Se mostró contrario a la gimnasia amorosiana como doctrina y planteamiento unívoco, permaneciendo más cercano a las nuevas formas de entender la Educación Física escolar promovida por la Institución Libre de Enseñanza. Sus obras, programas, tratados y trabajos sobre Gimnástica han servido de referencia para la enseñanza de dicha materia, siendo utilizados por profesores de distintos institutos de España de su época.