La acción teológico-pastoral de Mons. Marcos G. McGrath en la recepción y aplicación del Concilio Vaticano II en Panamá

Resumen

El concepto recepción tiene un sentido teológico-eclesiológico. Podemos definirlo, referido al Concilio, como la asimilación vital, por parte de la comunidad eclesial, de una doctrina, un documento, unas normas emitidas por la jerarquía de la Iglesia. Sin embargo, no se debe entender la recepción puramente como un acto de obediencia sino como el ejercicio por asimilar lo que ha sido propuesto. Más que una repetición de lo establecido, se trata de algo activo y creativo que responde a la realidad; que hace que la Iglesia crezca y que se encuentre con su pueblo. Con palabras del P. Yves Congar la recepción podemos entenderla como “el proceso por el cual un cuerpo eclesial hace suya una determinación que no se ha dado a sí mismo, reconociendo en la medida promulgada, una regla que conviene a su vida". Por eso se puede señalar que todo acto de recepción implica una dinámica de apertura, al mismo tiempo que una capacidad de entrar en el espíritu de la realidad o del hecho que se desea asumir. Esta recepción y asimilación es fruto del Espíritu que asiste a la jerarquía y anima al pueblo que recibe la doctrina.